Dos versiones sobre lo ocurrido en el interior de una vivienda del Barrio Badén y un final común. Una discusión familiar finalizó con un joven gravemente herido de una puñalada en el pecho, dos mujeres con lesiones leves y un hombre con un golpe en la cabeza. Este último fue aprehendido en el lugar y llevado a una audiencia de control de la detención y apertura de la investigación el lunes por la mañana, imputado por hechos que fueron calificados por la Fiscalía como constitutivos de tentativa de homicidio.
El domingo a la madrugada, la Comisaría Segunda recibió un llamado de una vivienda del Barrio Baden II. Un móvil con dos policías fue al lugar. En la vereda, yacía un sujeto en posición fetal. A simple vista constataron que tenía manchas hemáticas en la ropa. Junto a él, había dos personas. Adentro de la vivienda una mujer gritaba a los policías, pidiéndoles que entren. La mujer dijo que la persona que estaba tirada en el exterior era su hijo, que había sido apuñalado por su pareja, quién se encontraba en una de las habitaciones de la vivienda con un golpe en la cabeza.
El sindicado fue aprehendido por los uniformados.
Ezequiel Forti, funcionario de Fiscalía, describió el hecho indicando que el domingo a las 2:30 hs. aproximadamente, el imputado, su pareja y los hijos de esta se encontraban en la vivienda familiar. El imputado le habría tocado la mano a la hija y a partir de allí se inició una discusión con el hermano de la joven. Según este relato, el sindicado habría ido a una de las habitaciones, regresó con un cuchillo y le dio una puñalada en el pecho al joven, provocándole lesiones de gravedad que pusieron en riesgo su vida. Las dos mujeres trataron detener la agresión y el sujeto, con el cuchillo las hirió, a una en el brazo derecho y otra en el antebrazo y mano izquierdos. Una de las mujeres lo golpeó con una botella en la cabeza y el imputado se refugió en una de las habitaciones hasta que llegó el personal policial.
El defensor Marcos Ponce pidió que se escuche la versión de su defendido. El imputado, aceptó la autoría de la puñalada, aunque con una versión diferente del modo en que se sucedieron los hechos, dando a entender que actuó en su defensa. En su defensa alegó que en los años que convivió siempre tuvo buena relación con la familia de su mujer.
La Fiscalía cuenta con un plazo de seis meses para realizar la investigación. Para prevenir los riesgos de entorpecimiento procesal y fuga, el imputado fijó domicilio en la casa de su hermana, no podrá regresar a Esquel en los próximos 30 días y deberá presentarse una vez por semana en la comisaría más cercana.